Entre Ríos: la lucha del Polo Obrero en Concepción del Uruguay

Movilización piquetera

El 5 de septiembre, los compañeros del Polo Obrero de Concepción del Uruguay ingresamos masivamente al municipio local. Esta acción estuvo motivada porque hace dos meses presentamos una carta al intendente Martín Oliva -que pertenece a Unión por la Patria (ex Frente de Todos)-, donde exigíamos la solución urgente a compañeros que durante el invierno necesitan chapas, frazadas y colchones, debido a sus pésimas condiciones habitacionales. Además de que existen importantes demoras en la entrega de bolsones de comestibles que el municipio solía entregar mensualmente y no lo está haciendo.

Pero hay un hecho más grave aún, que es el recorte en la entrega de pollos, que pasó de 28 a solo 5 para nuestro comedor, que atendía a 400 personas, y que quizás era su única comida diaria para muchos de ellos.

Un dato importante es que en “la histórica” se encuentra una de las empresas avícolas más importantes del país (3 Arroyos), que durante la pandemia fue declarada “esencial” y que, por lo tanto, vendía hasta en el exterior y no tiene manera de estar en crisis. Y aún así, el intendente decide recortar las cantidades, lo que demuestra la orientación política antiobrera y siniestra, capaz de quitarle el alimento a las infancias.

El municipio no abastece ni con verduras frescas ni con grasa a los merenderos y solo dan un solo vale de gas para dos barrios, lo cual hace muy difícil de sostenerlos a pulmón, con compañeros que tienen el miserable Potenciar Trabajo de 56.250 pesos, en un país donde comer hoy significa más de 100.000.

Nos atendió la secretaria de Acción Social, Marianela Marclay, que antes no lo había querido hacer, junto con el secretario de Gobierno, Juan Garay. Los funcionarios se exculpaban de la situación actual argumentando que las demoras suceden por las licitaciones que no aceptan los productores de alimentos, y en la discusión que se suscitó le “recordamos” que la diputada del Partido Obrero-FITU Romina Del Plá presentó un proyecto para que se declare la emergencia alimentaria y se pasen por alto estas licitaciones, y el Estado pueda comprar directamente y abastecer a los más de 11.000 comedores del país, actualmente casi vacíos, y que los diputados de su gobierno lo rechazaron, por lo que ahora, es su problema resolverlo de inmediato.

Estas demoras no nacen del repollo sino de una política de ajuste a los que menos tienen, y que se acentuó tras la devaluación que hizo el gobierno luego de las elecciones Paso, para satisfacer al puñado de capitalistas que gobiernan el país y como lo exige el FMI.

Además, dejamos en claro que con el recorte alimentario del gobierno de los Fernández-Fernández-Massa, en la ciudad hemos recibido un cuarto de lo que Nación estaba mandando y con demoras de hasta cinco meses, como sucede en todo el país, denunciado hasta por organizaciones de desocupados ligadas al gobierno actual.

El derrumbe de los salarios y jubilaciones por parte de los gobiernos empuja cada vez más a las familias trabajadoras a venir a nuestros comedores y merenderos, que ahora intentan ser vaciados por la coalición gobernante.

Le avisamos a estos funcionarios que si no hay una respuesta satisfactoria en dos semanas para todos los compañeros/as, vamos a debatir en asambleas endurecer las medidas de acción.

Es fundamental salir a las calles para frenar este ajuste brutal al que nos somete el gobierno fondomonetarista, en total complicidad con las burocracias sindicales.

Y también para frenar a la derecha de Milei y Bullrich.

Por todo lo antes mencionado, estamos en estado de alerta.

¡Basta de ajuste! ¡Fuera el FMI!

https://prensaobrera.com/politicas/tras-un-ano-de-massazos-la-pobreza-llego-al-401-y-la-indigencia-a-93