Córdoba: deliberó la asamblea abierta del Partido Obrero de zona norte

Por la unidad de ocupados y desocupados, para derrotar el ajuste de Milei y Llaryora preparemos la huelga general. 

Corresponsal

El pasado sábado 13 sesionó la asamblea abierta del Partido Obrero de zona norte de la ciudad de Córdoba, con la participación de numerosos militantes y activistas de asambleas barriales que luchan por trabajo genuino, por la tierra y la vivienda y sostienen comedores y merenderos populares. A pesar de la copiosa lluvia y los cuantiosos problemas que eso genera a los vecinos en las barriadas, la concurrencia demostró una amplia predisposición a la organización y la lucha.

El informe de la asamblea fue un disparador para debatir los problemas y reivindicaciones más acuciantes de las barriadas populares que luego de cuatro meses de gobierno mileista han visto agravadas sus condiciones de vida de manera radical. El hambre y la carestía social alcanzan a cada vez más hogares, y los comedores y merenderos que asisten a cientos de familias empobrecidas empadronadas en el Polo Obrero no dan a vasto; a esto se suman nuevas familias que, incluso con trabajo formal, no pueden alimentarse diariamente con ingresos carcomidos por la inflación.

Se concluyó en que la estigmatización y los discursos de odio hacia el movimiento piquetero, del gobierno nacional y provincial, tienen como objetivo la fragmentación de la clase obrera para allanar el camino a una agenda profundamente antiobrera y antipopular. La adecuación de los métodos de lucha del Polo Obrero en los barrios frente a este nuevo escenario de intento de disgregación social debe apelar a una salida colectiva e independiente de todos los gobiernos. Por eso se resolvió la organización de ollas populares, asambleas y piquetazos contra el hambre y las reivindicaciones populares, como canal de reagrupamiento, pero también de exigencia a todos los gobiernos.

La cuestión educativa ante la amenaza del cierre de la Universidad Nacional de Córdoba, por el brutal recorte presupuestario, y el reconocido deplorable estado de las escuelas y terciarios provinciales, pusieron como eje la defensa de la educación pública a la que asisten los hijos del pueblo. La marcha federal educativa del próximo 23 de abril debe convertirse en la antesala de una rebelión educativa que unifique la lucha de docentes, estudiantes y familias contra el intento de vaciamiento y privatización que persiguen todas las fuerzas políticas de la burguesía.

Los despidos en áreas públicas sensibles a las poblaciones vulnerables, los recortes presupuestarios en salud, educación y servicios esenciales; los tarifazos y el intento de represión y criminalización a los que luchan son el caldo de cultivo de la organización de trabajadores y sectores populares. En un cuadro en el que también se aceleran los choques entre capitalistas, debemos defender un programa de clase, para no poner a los trabajadores como furgón de cola de planteos burgueses, como la defensa del falso cordobesismo en beneficio del capital agrario o las patronales industriales que plantea Martín Llaryora.

Debemos rechazar de plano la trampa de que “hay que esperar” que propone la oposición dialoguista y las centrales sindicales de las CGT y las CTAs, porque mientras por arriba negocian, el ajuste lo aplican sin fisuras en todo el país. Mientras Llaryora negocia las bases del pacto federal en Córdoba, ya ha sentado las bases para la reforma laboral y previsional con un ajuste incluso superior al de Milei en la provincia.

El único norte estratégico para una salida a la crisis en función del pueblo es la unidad entre trabajadores ocupados y desocupados, lo que incluye al amplio universo de informales. Pero esa unidad no puede ser declamada, es necesario organizarla, desbordando desde abajo la contención de las burocracias sindicales y sociales, y rompiendo las maniobras de gobiernos provinciales y municipales.

La asamblea resolvió la preparación de la huelga general para derrotar el ajuste de Milei y la motosierra de Llaryora, y por una salida de trabajadores. Para ello, el próximo 18 de abril preparamos la participación en el plenario provincial de trabajadores ocupados y desocupados junto a Uepc-Capital, ATE-Córdoba, Sutna, Químicos y Petroquímicos, etc.

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