Con más de 200 compañeras y compañeros de AGD UBA y Jóvenes Científicos Precarizados (JCP) en una columna conjunta con no docentes convocados por la Comisión Interna de Sociales (Apuba), estuvimos presentes en la inmensa movilización y acto del 20.

Este salto en la concurrencia ya lo veníamos percibiendo desde seis días antes. El brindis convocado por el sindicato no sólo dejó chico el salón de nuestra sede sino que demostró un giro en el “clima” de los primeros días posbalotaje. Tanto en el número de los asistentes como en la recepción del saludo allí realizado donde se convocó a estar más organizados que nunca y a concurrir el 20 marchando con el sindicato, demostraron creciente combatividad en el activismo. Y ya en la propia semana de la marcha, donde hablamos con cada afiliado que se acercó a retirar el obsequio de finde año, tuvimos la certeza que en todo un sector de la docencia algo estaba cambiando.

El ataque a la universidad estatal, pública gratuita y laica declarado por el gobierno y a nuestro 82% móvil conquistado con años de lucha se suma a un deterioro creciente en los salarios y jubilaciones –que además, en este contexto inflacionario, se actualizan cada tres meses- sufridos desde el gobierno de Macri e incrementado con los Fernández Massa. Además con un presupuesto que ya fue ajustado en 2023 y que Milei dice no sufrirá ninguna adecuación por inflación en 2024, los augurios son nefastos para las necesidades de infraestructura y funcionamiento de la obra social y funcionamiento en general de las universidades en este año.

Por eso, desde los resultados de las Paso en agosto es que, desde la conducción de AGD UBA, venimos desarrollando una política y acciones en función de fortalecer la organización para defender la universidad contra la mercantilización y privatización y a los derechos de las y los docentes. Con un llamamiento al frente único de lucha con un programa concreto en ese sentido convocamos en septiembre a un “cabildo abierto” contra las amenazas de Milei y la derecha y contra el ajuste que estaba aplicando Massa, y posbalotaje a una reunión de estudiantes, docentes y no docentes que se declaró en estado de alerta y movilización y que, ante el llamamiento de las organizaciones piqueteras en Parque Lezama y del Plenario del Sindicalismo Combativo, decidió convocar a la movilización el 20-12, contra el plan de ajuste y motosierra de Milei y el FMI y por nuestros reclamos. Para esta reunión invitamos a los otros dos sindicatos docentes de la UBA (Aduba, en CGT, y Feduba en CTA T) y a Apuba , sindicato de no docentes, que no concurrieron y tampoco movilizaron.

Con ese mandato fuimos a proponer al plenario de Conadu Histórica, que la federación y sus sindicatos de base -atravesados por los mismos problemas y amenazas que la docencia de la UBA-, se sumen a la convocatoria del 20, cuestión que no tomaron quedando solo un saludo genérico a “las movilizaciones que se realicen contra el ajuste” . Llevamos también la propuesta a distintas reuniones, brindis y asambleas que se realizaron en colegios y facultades de la UBA, entre ellas una interclaustro en Exactas que votó movilizar con AGD UBA el 20.

Todo este proceso, que nos permitió abrir un profundo debate y deliberación en la docencia, especialmente entre el activismo, fue generando las condiciones para que surja este crecimiento en la movilización. Fue todo un recorrido que mostró una vez más que AGD UBA es una referencia para la defensa de los intereses de las y los trabajadores.

Si bien ahora entramos en el receso de verano, los pasos dados nos dejan en mejores condiciones para la pelea que sin lugar a dudas tendremos que dar seguro desde febrero y posiblemente también antes. Como dijeron docentes que en estos últimos días se acercaron al sindicato para afiliarse, ahora más que nunca es el momento de organizarse. Luchar sirve, vamos por un paro activo nacional.

https://prensaobrera.com/sindicales/enfrentemos-la-reforma-laboral-antiobrera-y-por-decreto-de-milei