El temporal de estos días puso de manifiesto la falta de obras en las diferentes localidades del conurbano bonaerense. Claramente Presidente Perón no es la excepción. La intendenta reelecta Blanca Cantero, que ya lleva casi 5 años en el cargo, no ha llevado adelante obras hídricas de fondo para evitar esta problemática que afecta a los vecinos desde hace décadas. Las fuertes lluvias dejaron como saldo caída de árboles y postes de luz, calles totalmente anegadas, zanjas rebalsadas y demás.

En su cuenta oficial, la intendenta subió una publicación en la que dice que “Servicios Públicos” se ha encargado del mantenimiento y de la limpieza de sumideros en la vía pública. Evidentemente esto no es del todo real. A su vez, la página del municipio no indica que haya visitado un barrio, mucho menos poner puntos de asistencia o hacer relevamientos.

Uno de los barrios más afectados y más poblado es la La Yaya, donde la inundación provocó que el agua ingrese a las casas destruyendo todo lo que tenía a su alcance. Junto a esto, el recorrido de la línea 404 ramal Glew por Guernica no concretaba todo su recorrido debido a que las calles colapsaron.

En una escuela, los alumnos debieron retirarse antes de que llueva, o los mismos directivos advirtieron a los padres que no se presenten los chicos, ya que la escuela en general no está en condiciones de funcionar normalmente en estas condiciones climáticas.

En el barrio “Villa Numancia y San Roque”, donde también el colectivo no puede ingresar al barrio, las calles tornan difícil la circulación para las familias obreras que viven ahí y que no pueden salir hacia su trabajo.

Los pasos bajo nivel de la calle 118 y 112 (inaugurados bajo la gestión del exintendente Aníbal Regueiro) se inundaron en las primeras 4 hs de lluvia; el agua no baja, lo cual prohíbe su utilización.

Las barriadas populares están en un estado totalmente paupérrimo. Kicillof en la provincia y Cantero en Perón actúan como correa de transmisión del ajuste brutal de Milei.

Párrafo aparte merecen los funcionarios que enviaron a los afectados a buscar mercadería a comedores del Polo Obrero, cuando Kicillof y Cantero han tenido una política de vaciamiento; mientras que Milei promueve su cierre definitivo.

Frente a esta problemática que venimos sufriendo los vecinos desde hace años, debemos organizarnos para conquistar en el distrito un plan de obras públicas que atienda todas estas necesidades, con la creación de una bolsa de trabajo local, bajo control de vecinos y trabajadores. Asistencia inmediata a las familias afectadas por el temporal.