Sindicales
23/12/2025
Contra la reforma laboral de Milei y el ajuste de Sadir, impulsemos un reagrupamiento independiente y combativo en Jujuy
La jornada del 18 fue un primer paso para llegar a miles de trabajadores abandonados por la burocracia sindical.
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Marcha del 18 en Jujuy.
La jornada de lucha del 18 de diciembre fue una señal de que el pueblo argentino va a enfrentar la reforma laboral y todo el paquete antiobrero de Milei. A pesar de que la CGT no convocó a paro hubo grandes movilizaciones en todo el país. En Jujuy, las convocatorias de la CGT y las CTA fueron muy pobres: movilizaron solo un pequeño aparato. El Cedems, diferenciándose de la burocracia sindical, convocó a paro para que los docentes se puedan movilizar e impulsó una columna independiente. En ella participaron trabajadores despedidos de Ledesma, docentes de base de Adep, docentes universitarios de La Multicolor, organismos de DD.HH, organizaciones piqueteras y la izquierda.
La diferenciación de una columna independiente contraria a una división significa una clarificación de quienes quieren luchar contra la reforma y quienes están especulando para negociar con el gobierno. La clase obrera está ante una prueba de fuerza quizá de las más duras desde la dictadura para acá. El paquete de reformas que pretende aplicar el gobierno hacer retroceder un siglo los derechos de los trabajadores.
La CGT, frente a la magnitud del ataque, en vez de impulsar un plan de lucha, forma parte del Consejo de Mayo con Milei, los gobernadores y los empresarios, en el que hace meses se viene discutiendo la reforma laboral. La convocatoria a movilizar fue porque no pudieron quitar algunos artículos que afectan las cajas de los sindicatos, nunca fue para evitar que avance la reforma. No solo no convocaron a paro el 18, sino que no hicieron ninguna asamblea para que los trabajadores debatan cómo les impacta la reforma laboral. Ni hablar de que vienen dejando pasar despidos, cierres de fábrica y paritarias del 1% sin levantar la perdiz, mientras negocian con Milei.
En Jujuy quienes encabezaron la columna de la CGT fueron los de la “Corriente Saúl Ubaldini” que hicieron campaña por la lista de Sadir en las últimas elecciones. La CTA no se queda atrás y la encabeza Hamud, pichón de Rivarola, que fue parte del robo de Adep a los docentes. Es claro que no podemos derrotar la reforma laboral con estos dirigentes sindicales.
¿Milei está fuerte?
Algunos pueden pensar que Milei está fuerte por los resultados electorales, pero estamos ante un gobierno que se muerde la cola. La economía sigue en recesión, la inflación vuelve a subir y no consigue los dólares necesarios para hacer frente a los vencimientos de deuda. Este fracaso económico es la razón del apuro del gobierno para que salgan las reformas.
La única fortaleza de Milei es el acompañamiento de la oposición patronal. Los gobernadores radicales y peronistas acompañan la agenda antiobrera y aplican el ajuste en sus provincias. En Jujuy Sadir está golpeado por la feroz interna con Gerardo Morales, por los resultados electorales y por un agotamiento de régimen de saqueo, negocios y autoritarismo de estos 10 años que carga un gran repudio popular.
Preparar la huelga general para febrero
Tenemos menos de 2 meses para preparar una respuesta a la altura del ataque del gobierno. Está visto que con la burocracia sindical entreguista no vamos a poder enfrentar a Milei, ni tampoco podemos confiar en proyectos alternativos en el Congreso o fallos judiciales que solo jugarán un rol de distracción (aprendamos de lo sucedido con Discapacidad y Ley de Financiamiento Universitario).
Todo el paquete de reformas es una calamidad para los trabajadores, pero la peor de todas es la laboral porque va al hueso atacando su organización colectiva, los convenios colectivos, la negociación, las paritarias, los sindicatos como herramienta de defensa y lucha o lo que aún queda.
A pesar de la entrega de sus direcciones y el intento sistemático de fragmentarnos como clase, enfrentando trabajadores formales con precarizados, la defensa de los sindicatos como herramienta de lucha y organización es primordial.
Impulsando asambleas, reuniones de delegados y plenarios abiertos que involucren a trabajadores abandonados por sus sindicatos, informales y jubilados que no tienen un canal para debatir y organizarse, puede surgir el engranaje que permita la articulación y recomposición de la unidad de la clase trabajadora. El único camino que puede generar las condiciones de organización y planificación de un plan de lucha por la huelga general.
El reagrupamiento independiente y combativo como el que convocó a la marcha del 18 puede convertirse en una referencia para miles de trabajadores jujeños. Por eso hacemos la propuesta de un plenario resolutivo para principios de febrero que parta de la convicción de que la reforma laboral se derrota con la huelga general. Rechazando cualquier negociación de la ley con el gobierno, enfrentando todo el paquete de reformas (modificación Ley de Glaciares, educativa y del Código Penal) y levantando un planteo reivindicativo para las paritarias provinciales de 2026: 40% de aumento por la pérdida de los últimos años, pase a planta permanente y estabilización laboral de todos los cargos docentes y blanqueo del salario
El Frente de Izquierda debe acompañar este objetivo para que se abra paso una nueva dirección en el movimiento obrero. La experiencia de los plenarios anteriores con sectores de la burocracia sindical terminaron no resolviendo nada concreto y generando desánimo en muchos activistas y luchadores. Por eso no se trata de festejar que un burócrata nos apoye en tal o cual reclamo, sino de que un bloque independiente sea capaz de impulsar un movimiento de lucha que pase por arriba todas las trabas que tenemos empezando por la burocracia sindical traidora.
La historia nos llama y debemos estar a la altura.
