Sindicales

28/9/1992|367

Foetra Buenos Aires de pie: Para recuperar sus conquistas

A.

A fines de octubre se renovará el convenio de los trabajadores telefónicos. La Comisión Admi­nistrativa de Foetra Buenos Aires elaboró un anteproyecto —para ser presentado a la Federación Nacional— en la que no fijaba ninguna de las reivindicaciones centrales por las que viene lu­chando el gremio (ni monto salarial, ni horario—solo una vaga referencia a una "reducción horaria"). Varone trató que esto fuera aprobado por el plenario de delegados sin debate previo en la base. Pero fue rechazado por 73 a 58 votos, merced a una alianza que se estableció entre los delegados de agrupaciones de izquierda (fundamentalmente la Naranja), independientes y de sectores entro izquierdistas aliados a ATE y el Chacho Álvarez.

Junto a este rechazo se impu­so también la idea de reconvocar al plenario de delegados para aprobar un anteproyecto, pero dentro de la jornada laboral—y no fuera como planteaba la Directiva.

“La renovación del convenio colectivo puede servir: para entregar más conquistas a cambio de nuevas prebendas para el aparato sindical rodriguista o para recuperar e incor­porar cláusulas que resguarden la estabilidad de los telefónicos” planteó este bloque combativo que se impuso en el plenario de delega­dos.

El lunes 21, el nuevo plenario votó por unanimidad, con el man­dato de las Asambleas de Oficina el reclamo:

-De 35 s, semanales (7 Hs. de trabajó en refrigerio incluido).

-De $ 1000 de salario básico para la letra ‘’A" como mínimo. Inmediato blanqueo de los pagos en negro.

-Recortes al poder empresario, porque pretenden seguir con las auto-contrataciones de "sus" contratistas (ellos mismos con otros nombres),

-Reencuadres, 20 días por enfermedad familiar y otras mejoras al convenio colectivo.

-Que el 50% de delegados sean de Buenos Aires.

El plenario resolvió refrendar esta posición en una Asamblea General y convocar a una movilización sobre las empresas para el viernes 2 de octubre para reclamar el cese de las persecuciones, sanciones y presiones de las patronales sobre compañeros que ella señala como “indeseables” y a los que está preparándose para despedir, y para reclamar por el convenio y salario que necesitamos.

Los telefónicos de la capital se están poniendo de pie para recuperar las conquistas que la era menemista nos arrebató.

Es necesario que el bloque combativo del cuerpo de delegados constituido en esta oportunidad transcienda para construir una alternativa de lucha para el gremio.