Sindicales

20/3/2023

Los salarios de las trabajadoras de casas particulares, entre el ajuste y la inflación

Organicemos la lucha por el salario, contra la precarización y por todas nuestras reivindicaciones.

Trabajadoras de casas particulares.

El 21 de marzo se reunirá el Consejo del Salario, que deberá fijar aumentos para el salario mínimo. Esto es importante para las trabajadoras de casas particulares, porque el salario mínimo es tomado como referencia para la categoría más masiva de trabajadores (servicios generales, limpieza, etc).

Los aumentos que dictará el consejo serán a medida del ajuste que reclama el FMI. El Ministerio de Trabajo viene acordando paritarias a la baja con Upacp (el gremio con mayor cantidad de trabajadoras de casas particulares afiliadas).

Estos “incrementos” tendrán lugar en el marco de un proceso inflacionario que golpea el bolsillo de los trabajadores. Hace poco se conocieron los datos del Indec sobre la inflación, que fue en febrero de un 6,6% promedio y un 102,5% interanual. El ajuste contra los salarios es una política de Estado, que está en línea con las políticas reclamadas por el FMI y las patronales. Sergio Massa pactó con las burocracias sindicales de las centrales obreras implementar un techo salarial anual del 60%, cuando la inflación podría cerrar a fines de este año en más de un 100%.

El gobierno nacional y los gobiernos provinciales, además, quieren hacer pasar esta agenda mediante la criminalización de la protesta y la persecución política de luchadores. Un ejemplo de esto es lo que ocurre en Mendoza, donde Martín Rodríguez y Lorena Torres, militantes del Polo Obrero, fueron detenidos por el gobierno de Rodolfo Suárez (que suma decenas de compañeros procesados por luchar) por movilizarse contra el hambre.

Todos los partidos patronales están embarcados en esta campaña. Por ejemplo, la ministra de Desarrollo Social del Frente de Todos, Victoria Tolosa Paz, trata de extorsionadores a los trabajadores organizados en el movimiento piquetero que lucha contra la miseria; y el fascista José Luis Espert, pide “cárcel o bala” para quienes ejercen su derecho a protestar.

Las trabajadoras de casas particulares, empleadas domésticas y cuidadoras debemos enfrentar esta política que nos condena a la indigencia. El camino es la unidad con el conjunto de las luchas que se desarrollan, como la del movimiento piquetero o la de la docencia que se autoconvoca en todo el país para enfrentar el ajuste.

Este martes 21, desde el Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares (SiTraCP) nos sumaremos a la jornada nacional de piquetes por la libertad de Lorena y Martín, y en ese marco también reclamaremos al Consejo del Salario un salario mínimo equivalente a la canasta familiar indexado por la inflación, la reapertura de las paritarias y nuestra inclusión en la mesa salarial de la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares.

Llamamos a todas las trabajadoras a sumarse al Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares para organizar la lucha por el salario, contra la precarización y por todas nuestras reivindicaciones.

¡Somos trabajadoras, no esclavas!